jueves, 15 de abril de 2010

Ya viene el calor, ¡dame algo frío, por favor!


Ahora que ya se va acercando el buen tiempo, hablemos de postres helados. Y para empezar, nada mejor que un par de recetas fáciles para hacer sorbete: de frutos rojos y de mandarina.

1. Receta.

a) Sorbete de frutos rojos:

Necesitáis un par de moldes para cubitos de hielo (cubiteras).

Para cuatro personas, los ingredientes serían:

- Medio litro de zumo de frutos rojos en brick: se puede sustituir por zumo de frutos del bosque o por cualquier otro zumo más o menos ácido. Si lo sustituís por un zumo de fruta dulce (tipo melocotón), entonces tenéis que reducir considerablemente el azúcar de la receta.

- 200 g. de azúcar.

- Dos claras de huevo: con las yemas se pueden hacer muchas cosas, pero en el mismo día, porque no conviene conservarlas sin cocinar más de un día en la nevera. Si el día que vais a hacer el sorbete hacéis por ejemplo una empanada, podéis aprovechar la yema para pintarla para que os quede doradita. También se pueden cocer las yemas y luego triturarlas para echarlas como adorno sobre unos huevos rellenos, por ejemplo. O simplemente cocerlas y comerlas con sal.

- Una rama de menta: si no os gusta la menta, se puede prescindir de este ingrediente o se puede usar para decorar en vez de como ingrediente propiamente dicho.

¿Y cómo se hace?

Esta receta es de las más fáciles que yo conozco, casi casi tanto como la del tapenade que pusimos hace tiempo en el blog.

Se ponen todos los ingredientes en un recipiente para batidora y se baten.

Con esta mezcla se rellenan las cubiteras y se meten en el congelador durante aproximadamente cuatro horas.

Antes de servir el sorbete, se sacan las cubiteras del congelador, se vacían en un recipiente para batidora y se baten hasta que quede una mezcla cremosa.

Se sirve en copas con la decoración que prefiramos (la menta, frutas del bosque o frutos rojos, figuritas de chocolate…).

Este preparado se puede conservar perfectamente en el congelador, por lo que no hace falta prepararlo en el día (las cuatro horas de las que hablamos en esta receta son el mínimo, no quiere decir que tengan que ser estrictamente cuatro horas). Lo único que hace falta es batirlo al sacarlo del congelador antes de servirlo.

En total podéis haber empleado unos diez-quince minutos en batir (las dos veces) más el tiempo que el sorbete pasa en el congelador (cuatro horas o más).

b) Sorbete de mandarina:

Para cuatro personas, los ingredientes serían:

- Medio litro de zumo de mandarinas frescas: se puede sustituir por zumo de naranja.

- Medio litro de zumo colado de limón

- 500 g. de azúcar.

- Dos claras de huevo: recordad que, como hemos dicho arriba, no hace falta tirar las yemas, que con ellas se pueden hacer muchas cosas.

- Una rama de menta o un rizo de la cáscara de las mandarinas para decorar: la decoración no es necesaria, pero siempre alegra el postre, sobre todo cuando tenéis invitados.

¿Y cómo se hace?

Se pone el zumo de mandarina y el azúcar en un cazo. Hay que remover hasta que hierva y se deshaga el azúcar. En ese momento se retira del fuego y se deja enfriar.

Una vez frío, se añade el zumo de limón y se mezcla bien.

Se mete la mezcla en el congelador y se deja unas cuatro horas.

Se saca del congelador poco antes de servirse, se baten las claras a punto de nieve y se mezclan bien con la masa que hemos sacado del congelador. Esto hace que la textura del sorbete sea más suave, pero si no mezcláis bien, puede dejar grumos blancos. Si veis que no os queda del todo bien, en futuras ocasiones podéis simplemente prescindir de las claras de huevo y batir la mezcla sacada del congelador antes de servirla en las copas. O añadir las claras de huevo batidas a punto de nieve pero mezclándolas con el sorbete con la batidora.

Se sirve en copas con la decoración que prefiramos (la menta o la cáscara de mandarina, figuritas de chocolate…).

En total podéis haber empleado unos veinte-veinticinco minutos más el tiempo que el sorbete pasa en el congelador (aproximadamente cuatro horas).

2. Historia.

Los sorbetes fueron los primeros postres helados.

La palabra sorbete viene del árabe ("charab”) y del turco (“chorbet”), que al italiano pasaron como “sorbetto” y al francés como “sorbet”.

En sus orígenes el sorbete estaba compuesto de nieve con frutas, miel y sustancias aromáticas.

Hay historiadores que mantienen que estos sorbetes ya eran conocidos por los egipcios. Se cuenta que Alejandro Magno mandaba traer nieve de las montañas para refrescar los vinos y también algunos alimentos, mientras que el emperador Nerón enfriaba sus zumos y sus vinos con hielo o nieve traídos de las montañas de los Alpes por sus esclavos. Otros historiadores dicen que los sorbetes fueron inventados por los chinos en el año 3.000 a.C.

Durante la Edad Media, en las cortes Árabes se preparaban productos azucarados con frutas o zumo de éstas enfriadas con nieve. Estos productos se conocían con el nombre de “charat”. Está documentado sin duda que hacia el año 1.100 los países islámicos ya disponían de nieve prensada, conservada en cuevas durante todo el verano, con la que se hacían los sorbetes. El procedimiento consistía en agitar una vasija cerrada que contenía el líquido sumergiéndola en la nieve.

Marco Polo, en el siglo XIII, al regresar de sus viajes al Oriente, trajo varias recetas de postres helados usados en China durante cientos de años, elaborados a base de frutas, miel y nieve, los cuales se implantaron con cierta popularidad en las cortes italianas, conociéndose con el nombre de “sorbetto”, silogismo del turco “chorbet” (cuyo significado es “bebida”).

El primer artilugio que se utilizó para la confección de sorbetes fue la denominada "garrafa", que era un recipiente con una tapa con un asa que se introducía en un recipiente mayor, normalmente de madera, el cual contenía una mezcla frigorífica compuesta por nieve prensada y sal (modernamente la mezcla se hace con hielo picado y sal). Se movía la garrafa por el asa de derecha a izquierda y viceversa, para que no se formasen hielos y de vez en cuando se abría y se quitaban con cuchara de madera las adherencias en las paredes, continuando posteriormente la operación.

Obviamente la elaboración de los helados no era sencilla, ya que era imprescindible disponer de nieve y de los medios para conservar la temperatura. Esto hacía de los sorbetes un placer que tan sólo disfrutaban los reyes y las personas privilegiadas de esa época. Según referencias históricas, en los siglos XVI y XVII, en las cortes de España, Francia e Inglaterra, se elaboraban y servían helados y sorbetes.

3. Curiosidades.

A diferencia de los helados, los sorbetes no contienen materia grasa o la contienen en poca cantidad, por lo cual sus aportes calóricos son menores (66 kcal. por 2 bolas). También son pobres en sodio (hasta dos veces menos que el helado) y, según la fruta que se utilice, pueden contener buenos aportes de vitamina C.

En la zona del Maghreb y del norte de África se hace un tipo de sorbete llamado Agraz, cuyos ingredientes son almendras, verjus y azúcar. Tiene un sabor fuertemente ácido, debido al verjus.

Durante la 1ª Guerra Mundial, los sorbetes figuraban en los menús clásicos, después de los pescados y de las entradas y antes de los asados para cambiar el gusto del paladar y conservar despierto el apetito.

Un tercio de todo el sorbete vendido en el mundo es de vainilla.

Estados Unidos es el mayor consumidor mundial de helados y sorbetes, con algo más de seis mil millones de litros anuales. Sin embargo, los neocelandeses son los más adoradores de este manjar con algo más de 26 litros de helado y/o sorbete al año por persona.

En Argentina, hasta mediados del siglo XIX, el hielo con el que se hacían, entre otras cosas, los sorbetes, llegaba desde Inglaterra o los Estados Unidos en barras envueltas en aserrín.

4. Conservación.

El sorbete no se puede conservar. Lo que sí se puede es hacer más cantidad y no sacar todo del congelador, dejando parte para otra ocasión. En este caso, habrá que sacar el producto del congelador algo antes de batirlo o calentarlo unos pocos segundos en el microondas para que se desprenda del recipiente en el que se haya congelado.


3 comentarios:

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  2. mejor cayate que meparese que es muey buena esta pajina

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    1. Me alegra que te guste nuestra página :o)

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